Barça: Prohibido pensar en el Madrid

El mensaje de Luis Enrique cala en el equipo, que aparca el clásico para no perder pie en la Champions ante el Ajax

La previa del Barça-Ajax

Javier Giraldo

21-10-2014 | 04:05 H.

El clásico del próximo sábado tiene el magnetismo suficiente como para eclipsar todo lo que le rodea, incluso un partido de la Champions en el que el Barça se juega buena parte de sus opciones de ser primero de grupo, pero los jugadores de Luis Enrique tienen que abstraerse del entorno para sacar adelante el partido de esta noche ante el Ajax de Amsterdam. La visita al Santiago Bernabéu ya espera a la vuelta de la esquina y el equipo no tiene margen de error en Europa como para despistarse pensando en el clásico, así que el mensaje de Luis Enrique ha calado plenamene en el vestuario: prohibido pensar en el Real Madrid y en todo lo que rodea ese gran partido.
El posible regreso de Luis Suárez tras su sanción, el penúltimo duelo del año entre Messi y Cristiano Ronaldo (volverán a verse las caras en el Portugal-Argentina del próximo 18 de noviembre en Manchester), la vuelta de Luis Enrique al Bernabéu, ya como entrenador del Barça, son solo algunos de los alicientes de un clásico que promete convertirse en un partido de altos vuelos, pero el Barça no se puede permitir el lujo de olvidarse de la Champions.
El calendario, que concederá un día más de descanso al Barça antes del partido frente al Madrid (que además, jugará a domicilio, en Liverpool, mientras que el Barça no se moverá de Barcelona), ha incrustado la visita de un histórico, el Ajax, a cuatro días del viaje a Chamartín.
En una semana, el Barça se enfrenta al club que inspira buena parte de su filosofía de juego y al rival antagónico por excelencia. Será un interesante viaje, del espejo a la antítesis, concentrado en pocos días. Pero la filosofía del partido a partido se ha instalado en el vestuario del Barça, una idea que ha llegado para quedarse.
LA CHAMPIONS NO PERDONA
Pero la Champions apenas concede margen de error, y el Barça ya gastó su primera bala en el Parque de los Príncipes ante el Paris Saint Germain. La derrota en París deja al Barça segundo de grupo, con tres puntos, uno por debajo del PSG, y por lo tanto, obligado a sumar de tres en tres de aquí al final de la fase de grupos, al menos para asegurarse la primera plaza. El Barça sigue dependiendo de sí mismo para cumplir la tradición de las últimas temporadas, acabar la fase de grupo como líder y por lo tanto, asegurarse la vuelta en casa en el cruce de octavos de final.
El partido ante el PSG en el Camp Nou, que se jugará el 10 de diciembre, cerrará la fase de grupos y decidirá probablemente el líder del grupo F. Pero para ello, el equipo de Luis Enrique debe superar hoy al Ajax de un exblaugrana, Frank de Boer.
De hecho, el partido de hoy ante el Ajax puede resultar mucho más decisivo para la Champions que el del Madrid en la Liga, donde el margen de maniobra es mcuho mayor. Ganar al Ajax es una obligación, mientras que en el clásico, un empate podría darse por bueno; no en vano el Barça llegará al Bernabéu con cuatro puntos de ventaja sobre el eterno rival.
Barça y Ajax vuelven a verse las caras después de su doble cruce del año pasado, el primero de su historia: el equipo blaugrana sufrió la primera derrota de la ‘era Martino’ en Amsterdam (2-1), aunque en el partido del Camp Nou, el Barça goleó (4-0) con un ‘hat-trick’ de Messi, en un partido más incómodo de lo previsto.
Aunque aún no ha ganado en esta Champions (sendos empates a un gol ante el PSG y el Apoel), el Ajax llega a Barcelona con la etiqueta de ser un equipo imprevisible, capaz de firmar momentos de juego brillante con tropiezos impropios de su jerarquía histórica: el equipo de Amsterdam ya lleva demasiado tiempo fuera de la elite europea y necesita un golpe de efecto en el Camp Nou para recuperar su viejo prestigio.
Desde el punto de vista numérico, para el equipo holandés el partido de esta noche supone prácticamente una final: con solo dos puntos en las dos primeras jornadas, necesita ganar cuanto antes para optar a acabar la fase de grupos entre los dos primeros y no repetir su mal sabor de boca del año pasado, cuando fue tercero de grupo.
A partir de las diez y media de esta noche, habrá barra libre para analizar los detalles del partido del Bernabéu. Pero hasta entonces, el Barça y el barcelonismo debe atender el mensaje de Luis Enrique: prohibido pensar en el Madrid.