Usted
ha jugado en la selección como falso nueve, por la banda y ante Uruguay
con libertad de movimientos en ataque, ¿dónde se siente más cómodo?
Es
verdad que el míster me dio libertad absoluta el otro día pero ya
veremos qué pasa. ¿Si me gusta? Sí, a todo jugador le gusta, a cualquier
futbolista le dices de pequeño, 'oye ¿dónde te gustaría jugar?' De
media punta liberado es la posición donde un jugador puede disfrutar más
del fútbol.
Pedro dijo el otro día que a lo mejor marca
más con España porque tiene más libertad, ¿usted también se siente con
más libertad aquí?
En el Barça hay un juego muy
posicional y no existe esa movilidad porque cada uno tiene un sitio más
específico en el terreno de juego y así es como se ha jugado los últimos
años. Yo, por ejemplo, me tuve que adaptar a eso. Venía de un fútbol
completamente distinto, como siempre se ha dicho anárquico, y al
principio me quería ir por la derecha, por la izquierda y eso no puede
ser porque desestabilizas al equipo. Por la derecha normalmente ya está
Xavi o de extremo están Pedro o Alexis o quien sea, por la izquierda
está Andrés... Hay movilidad con balón pero no sin él, pero cada equipo
juega de una manera distinta y hay que intentar adaptarse.
¿Se ha sentido en algún momento de esta temporada cuestionado?
No
lo veo así, veo que el fútbol es un deporte en el que puedes gustar o
no. Al final, lo que tienes que hacer es jugar como tú sabes. Es
imposible gustar a todo el mundo, ni los más grandes lo logran. Mira el
baloncesto, por ejemplo con Lebron James, uno de los más grandes de la
historia y hay gente, no sabes por qué, a la que no le gusta y en el
fútbol es igual. Yo voy siempre a luchar, a dar lo máximo, sé que lo
puedo hacer mejor, también sé que he hecho partidos buenos y desde la
crítica constructiva que siempre hago después de los entrenamientos, la
que me llevo a casa, intento mejorar siempre.
Se ha hablado mucho de su futuro e incluso de su vuelta a la Premier, ¿se ha planteado en algún momento dejar el Barça?
No, no, en ningún momento.
¿Lo que ha sucedido con Tito Vilanova les ha afectado tanto, sobre todo quizás en momentos puntuales?
Cuando
se fue, el equipo estaba muy rodado, estábamos muy bien, teníamos un
grado de confianza muy alto, lo ganábamos todo, jugábamos bien, parecía
que no hacía falta, pero quieras o no cuando vas a entrenar cada día,
los partidos, las charlas... No está el líder del proyecto, que es el
entrenador, y eso afecta. Es cierto que cuando va todo rodado parece que
no necesitas nada, pero con un partido malo o algo así te entran un
pelín las dudas y ahí sí que necesitas al entrenador. Y no estaba. Fue
complicado, también por lo de Abidal, ha sido un año que no puede ir a
peor a nivel de salud y el año que viene tiene que ir todo a mejor, ser
fuertes y seguro que todo va a ir bien.
¿El peor momento fue el de la eliminatoria ante el Bayern de Munich?
Cuando
pierdes por un global de 7-0 no puedes buscar excusas. Tienes que
aceptar lo que es, que a lo mejor fuese un pelín exagerado, puede ser,
pero te han ganado bien. A partir de ahí hay que olvidarlo y pensar en
lo que hicimos mal, cada uno individualmente y luego con el míster
colectivamente porque seguro que podíamos haber hecho mucho más todos
desde el punto de vista futbolístico y competitivo. Después de
felicitarlos, que lo hicimos, tenemos que coger cada uno nuestra parte
de culpa e intentar mejorar. Lo que crean los directivos y el entrenador
que hay que cambiar ya depende de ellos, pero por parte de los
jugadores cada uno tenemos que pensar en que no estuvimos al nivel y
nada más.
¿Se esperaba que Valdés dijese que no renovaba?
No,
yo no me lo esperaba pero esto es una decisión muy personal. Cuando
estás acostumbrado a una persona tanto, no te lo esperas. Hemos visto
durante tantos años a Víctor que es impensable no verlo en la portería
del Barça. Me sorprendió, pero es una decisión muy personal y se tiene
que entender.
¿Valdés les dijo algo en el vestuario?
No, yo no sabía nada, no sé el resto de mis compañeros, pero yo me enteré como todo el mundo.
¿Cómo vivió el regreso de Abidal y la posterior decisión de que no siguiera?
Con
muchísima alegría y con muchísima tristeza. Por un lado sientes una
alegría descomunal cuando ves que reaparece, cuando lo ves entrenando,
jugar, fue muy emotivo. El día de su despedida también fue especial pero
de manera triste porque ha sido un compañero para mí impresionante
durante los dos años que llevo aquí, he aprendido muchísimo de él y da
pena. Es una persona muy importante dentro de este equipo, dentro del
club y siempre echas en falta personas así.
¿A Mourinho lo van a echar de menos?
Eso
se lo tienes que preguntar al Real Madrid, no es nuestro entrenador y a
partir de ahí, nosotros tenemos que mirar por lo nuestro y nada más.
¿Cree que serán ahora más pacíficos los Madrid-Barça?
No
lo sé. Nosotros tenemos que estar orgullosos de la manera en que
siempre intentamos ver el fútbol, las ruedas del prensa, dentro y fuera
del campo, intentar hacerlo siempre de la manera más profesional y
positiva, con gran imagen. A nosotros mirar a los lados, mirar atrás, a
la otra gente, no nos sirve de nada, tenemos que mirarnos a nosotros
mismos.
Usted coincidió en la Premier con Ancelotti, ¿cómo son los equipos del ya entrenador del Real Madrid?
Hace
muchos años de eso, no me acuerdo. Pero ahora que hemos jugado contra
el PSG, la sensación es que son equipos a los que les gusta jugar,
bastante combinativos, con mucho juego por dentro y con laterales
largos.
Hay gente que dice que Messi y Neymar no pueden estar en un mismo vestuario...
También
están juntos Andrés, Xavi, Puyol, Dani Alves... y nadie dice nada. Todo
depende del ego de cada uno y si Neymar viene con la positividad que
transmite en las ruedas de prensa, con la humildad que vemos con la que
está dispuesto a venir no hay ningún problema. Con Leo se va a llevar
bien porque Leo es una persona supertranquila, no le gusta tener
enfrentamientos con nadie y creo que depende siempre de la actitud del
que viene porque entre nosotros nos llevamos fenomenal todos. Por lo que
veo de Neymar, que no lo conozco, me parece un gran chaval y creo que
viene aquí a ayudar, a sumar y no va a haber ningún tipo de problema.
¿Echaron de menos a Messi en algún momento de la temporada?
Cuando
no está siempre se le echa de menos. Es el mejor de la historia del
fútbol y siempre lo vas a echar de menos. Aunque no queramos aceptarlo, a
veces se tienen que ver otras variantes porque cuando él no está algo
se tiene que hacer. Lo que pasa es que cuando llevas cinco años en los
que Leo prácticamente ha jugado todos los partidos, uno se acostumbra a
estar pendiente de él, a que decida los partidos, a que siempre esté
ahí... Se te hace difícil mirar a derecha e izquierda y ver que no está
Leo. Al final, creo que lo hemos solventado bastante bien. Los últimos
partidos hemos estado bien y a partir de ahí, ahora habrá que comenzar
la temporada a tope, intentar evitar lesiones y que pueda estar con
nosotros.
¿Jugar contra Brasil es el gran reto que le queda a esta selección?
Más
que reto, es la ilusión por parte de toda la selección, de los
jugadores. Yo llevo siete años y medio aquí y no ha existido todavía la
oportunidad de jugar contra Brasil y haría especial ilusión por lo que
ha sido en el mundo del fútbol la selección de Brasil, por Brasil en
general y por ser la primera vez también.
¿Cómo explicaría lo que representa para un futbolista jugar en Maracaná, aunque sea remodelado?
Es
una sensación bonita porque sabes que es un estadio mítico. Sí que es
cierto que está remodelado y a lo mejor no es la misma sensación que
hubiera podido tener habiendo jugado en el viejo porque era mítico y
este parecía ya más un estadio normal como la pasada Eurocopa, pero sí
que es cierto que está construido encima del viejo y es una alegría
poder pisar este mítico estadio con la selección y al menos poder decir
que has jugado allí una vez.
A todo el mundo le sorprendió la deportividad de Tahití, ¿a ustedes también?
Sí
que sorprendió porque no lo vemos a menudo. Su humildad, sus ganas de
jugar, de conocernos y de pasar un buen rato transmitía muchísima
ilusión. Nos felicitaban cada dos por tres y al final del partido nos
hicieron pasillo y te hace sentir incluso un poco mal porque piensas
'les hemos ganado y nos lo están haciendo, tendría que ser al revés'.
Nos dieron una lección de como comportarse dentro y fuera del campo, fue
muy gratificante. Dieron una lección de humildad y deportividad.
¿Cómo le cambia la vida a uno ser padre?
Pues
cambia, la verdad, todo lo que hago ahora lo hago pensando en mi hija.
Te cambia la vida porque no hay mayor responsabilidad que ésta. Estoy
encantado, echándola de menos ahora, pero muy feliz.
¿Se enseñan fotos en el vestuario de sus criaturas y comentan que si ya habla, que si ya come esto o aquello?
(Risas)
La mía de momento ni habla ni come, sólo biberón y poca cosa más.
Crecen muy rápido y a veces hace ilusión enseñar la foto y decir 'mira
cómo está, mira qué grande', sobre todo ahora que hace ya casi 20 días
que no la veo y se echa de menos