Neymar y Messi, la mejor cura contra el 'virus FIFA'... y los malos arbitrajes

El Barça reivindicó su condición de campeón ganando de forma merecida a uno de los rivales más temibles de la Liga. Neymar y Leo Messi, que sólo jugó la última media hora, remontaron un 1-0 adverso en campo del Atlético en un duelo marcado por otro pésimo arbitraje, esta vez de Mateu Lahoz, que no señaló tres posibles penaltis favorables a los azulgranas

Messi marcó el 1-2 tras recibir una gran asistencia de Luis Suárez AFP

FICHA TÉCNICA

Liga BBVA: J.3 / Atlético-Barça

Barça

Atlético

Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe; Óliver (Yannick Carrasco, m. 60), Gabi (Vietto, m. 81), Tiago, Koke; Griezmann y Fernando Torres (Jackson, m. 62).

Barça

Ter Stegen; Sergi Roberto, Mascherano, Vermaelen (Mathieu, m. 27), Jordi Alba; Sergio Busquets, Rakitic (Messi, m. 60), Iniesta; Rafinha, Neymar y Luis Suárez.

Árbitro

Mateu Lahoz (C. Valenciano). Amonestó a los locales Óliver (m. 18), Filipe Luis (m. 43) y Giménez (m. 89) y al visitante Iniesta (m. 44).

Goles

1-0, m. 51: Torres culmina un pase de Tiago. 1-1, m. 55: Neymar, por la escuadra falta directa. 1-2, m. 77: Messi, tras una pared con Luis Suárez.

Incidencias

Partido correspondiente a la tercera jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 54.000 espectadores.

Ricard López

12-9-2015 | 21:19 H.

Las dos estrellas culés dieron el empujón definitivo al Barça en un gran partido de todo el equipo. Un triunfo muy trabajado que le encarama al liderato de la Liga, a la espera de lo que hagan este domingo el Celta y el Eibar. El temido parón por partidos de las selecciones no pasó esta vez factura, y los azulgranas cuentan por triunfos sus tres primeras jornadas de Liga, tras haber ganado por la mínima al Athletic (0-1) y al Málaga (1-0). Tres victorias de tres... y pleno de 9 puntos. Difícil empezar mejor el nuevo curso.
Luis Enrique sorprendió a todos dejando en el banquillo a Leo Messi, a quien sólo hizo jugar la última media hora -¡pero qué media hora!- después de no haber podido entrenar con el equipo a causa de los partidos de su selección y del nacimiento de su hijo Mateo. Una situación insólita, que no se daba desde su suplencia el pasado 4 de enero ante la Real Sociedad, y que desembocó en una derrota (1-0) y una crisis institucional que, por fortuna, no tuvo efectos a nivel deportivo: el Barça se acabó coronando campeón del 'triplete'.
Y una jornada más, el Barça tuvo que sufrir lo suyo y emplearse a fondo para sacar provecho de su mejor juego. A la ya esperada resistencia numantina de los de Diego Pablo Simeone, se sumó, por tercera jornada seguida, la falta de puntería y la mala suerte en ataque. Y, de nuevo, la ceguera de un árbitro, Mateu Lahoz, que no vio -o que no apreció como tales- tres clarísimas manos del Atlético dentro de su área. Dos penaltis de Giménez que, aún siendo involuntarios, bien hubieran podido pitarse antes del descanso... y otro de Godín en la reanudación, todavía más evidente. Más, incluso, que otro cometido por Mascherano por idéntico motivo pocos minutos antes. El caso es que, en sólo dos jornadas, el Barça ha visto cómo dejaban de señalársele media docena de penas máximas a favor. Hace dos semanas, ante el Málaga, Jaime Latre fue igual de miope con otras clamorosas manos de Torres y un derribo de Angeleri a Luis Suárez. Dos arbitrajes consecutivos igual de preocupantes y nefastos.
El Barça salió al césped concentrado, apretando y acorralando a su rival, pero el Atlético resistió su asedio en una primera mitad de claro color azulgrana. Los colchoneros llegaron 'vivos' al descanso de milagro. Los azulgranas dejaron su tarjeta de visita nada más empezar, cuando a los tres minutos de partido Giménez interceptó con la mano al caerse, supuestamente de forma involuntaria, un centro envenenado de Rakitic dentro del área local. Una acción tan clara como no punible, según el criterio de Mateu Lahoz.
La intensidad del Barça pareció desconcertar a un Atlético dubitativo. Al cuarto de hora, Oblak se lució despejando un trallazo de Rakitic en el área después de una gran jugada individual de Iniesta. El manchego, espléndido en este inicio de temporada, volvió a ser el faro del equipo en la media gracias a su creatividad y visión de juego, compenetrándose a las mil maravillas con el croata y su escudero Sergio Busquets, muy sobrio en labores defensivas.
El Atlético capeó el temporal como pudo, esperando como siempre soprender a la contra. Y casi lo consiguió en el 17', cuando a Torres disparó alto por muy poco tras una pérdida de balón de Mascherano. El argentino, algo impreciso, no tuvo su mejor noche.
La mala fortuna continuó cebándose con el Barça cuando, en el 24', Luis Suárez estrelló en el larguero un remate a bocajarro, casi a puerta vacía, después de que Rafinha peinara con la cabeza hacia atrás un saque de esqiuna servido por Rakitic. Instantes después, se produjo la peor noticia de la noche. Vermaelen, que tan bien había rendido en estas tres primeras jornadas supliendo al sancionado Piqué como central, tuvo que ser sustituido por una lesión muscular. Un auténtico mazazo para un futbolista que se pasó casi todo el año pasado en blanco por ese tipo de dolencias. Mathieu entró en su lugar, y su rapidez fue clave para frenar las embestidas del Atleti.
Superada la media hora, llegó la segunda mano de la noche, cuando Giménez, echándose al suelo a la desesperada, desvió con la mano un peligrosísimo chut de Neymar dentro del área (34'). La tercera corrió a cargo de Mascherano que, en el 48', desbarató de igual forma un centro de Fernando Torres.
La noche se torció en el 51', cuando Fernando Torres, a la contra, aprovechó una descoordinación de la defensa azulgrana para batir a Ter Stegen de chut cruzado al segundo palo. El balón, tras rebotar en el poste, entró en la red.
Pero el Barça se sobrepuso enseguida. Casi sin tiempo para lamentarse, en el 54', Neymar arregló el desaguisado ejecutando de forma magistral una falta. Su preciso disparo superó a la barrera por alto y se coló por toda la escuadra (1-1). Espectacular.
La entrada de Messi, en el 60', resultó decisiva, dando todavía más mordiente al ataque barcelonista. La chispa y la frescura del '10' sentenciaron a un Atlético que se defendía como gato panza arriba. En el 66', Godín sacó con la mano sobre la misma línea de gol un remate a bocajarro de Neymar que se colaba. Cuarto error de Mateu Lahoz, que ni lo señaló ni, obviamente, le sacó la tarjeta roja. Y el 1-2 que no llegaba...
La remontada llevó el sello, cómo no, de Leo Messi. El mejor futbolista del mundo decantó la balanza justo cuando el Atlético, con la entrada de Jackson Martínez, más enseñaba sus dientes en ataque. El '10' marcó su primer tanto liguero superando a Oblak en su salida después de recibir una asistencia de oro de Luis Suárez tras una rapidísima triangulación ofensiva (1-2, 77').
El Barça obtuvo la recompensa a su tesón y mayor ambición, sumando así un pleno de triunfos -3 de 3 posibles- que le mantiene en cabeza de la Liga.