Messi es la ley en el Camp Nou
El Girona se adelantó nada más arrancar el partido con un gol de Portu
Leo decidió, en media hora, que el 0-1 sería anécdotico con un partido escandaloso
Las bufandas mezclaban el rojiblanco con el blaugrana.
Y todo eran risas y buen rollo antes de empezar. Entre unos y otros. No
hay relación más sincera de amistad que la que une a las aficiones de
Barça y Girona. Entre
los seguidores blaugrana el cariño hacia el club gerundense es
mayoritario; los del Girona, directamente, tienen dos equipos. Cosas de la historia y de la geografía. Cosas del fútbol.
A los cinco minutos la cordialidad se había transformado en
hostilidad sincera. El Barça salió al campo como si no hubiera comido
nada en tres días: hambriento. Famélico de fútbol y goles. Dispuesto a
demostrarle a Valverde que acertaba con Dembélé y Coutinho. Pero fue Portu el que hincó el diente primero,
robándole hasta los calzoncillos a Umtiti y batiendo a Ter Stegen. El
Girona no había llegado para disfrazarse de ‘fast food’ a manos de los
blaugrana.
Buena carta de presentación hasta que Messi dijo que, en el Camp Nou, él elige el menú. Se la puso en bandeja tres minutos después del 0-1 para que Suárez empatara. Luego sirvió otro balón a Dembélé, algo lento e impreciso. También Alba degustó las asistencias de Leo. No habían pasado ni veinte minutos cuando el propio Messi estuvo a milímetros de marcar el golazo de la jornada de vaselina. Bernardo evitó el 2-1 al límite. Leo era pura energía, una olla presión reventándolo todo. Agarró un balón cedido por Suárez tras desplazamiento en largo para coser el balón a su zurda hasta encontrar la rendija por la que penetrar. Gol. Golazo. ¡Un genio desbocado en el Camp Nou! ¿La mejor media hora del ‘10’? Imposible responder. Como tener que elegir entre el Macallan de 18 o de 25 años. ¡Qué más da! Un trago sublime siempre.
Porque cada acción supera a la anterior y porque cada minuto que pasa Leo Messi se convierte en una versión mejor de Leo Messi. Cada mutación le aleja un poco más de la humanidad.
Lo siguiente fue una falta por debajo de la barrera que sorprendió a Bono. El 3-1 con el que el genio cerraba una primera mitad genial. “A Messi lo único que hay que hacer es disfrutarlo”, decía otro genio. Amén. (Párrafo escrito antes de que ‘Leo el generoso’ siguiera regalando caramelos). Lo que cerró el primer tiempo fue una contra liderada por el de siempre que acabó en asistencia a Coutinho. El brasileño se la puso a Suárez para el 4-1. Ahora sí, si D10S quiere, se llegó al descanso.
El Girona, aunque pudiera parecer lo contrario, nunca se alejó del partido. "Échame la culpa", cantaba Messi. Los de Machín jugaron un buen partido, pero insuficiente ante el vendaval argentino. Suárez hacía los coros y todos bailaban clavando la coreografía creada por Leo. El uruguayo envió un balón al palo a los diez minutos del segundo tiempo. Luego lo probó Dembélé tras otro regalo del '10'. Omnipresente.
Es tan grande que convierte en pequeños los gigantes partidos de sus compañeros.
El de Suárez, que lució su mejor traje, pero también el de Coutinho,
que asistió a su amigo antes del descanso y dibujó una curva imparable
para el quinto gol. ¡Qué golazo! O el de Dembélé, que se divirtió en la
banda y se la puso a Suárez para el 'hat-trick'. Leo Messi es la ley en
el Camp Nou y el resto, los ayudantes del 'sheriff'.
FICHA TÉCNICA
FC BARCELONA
6-1
GIRONA
FC BARCELONA
Ter Stegen, Semedo, Piqué (Vermaelen, 62'), Umtiti,
Alba, Busquets, (Paulinho, 69') Rakitic (Sergi Roberto, 77'), Coutinho,
Dembélé, Messi y Suárez.
GIRONA
Bono, Maffeo, Ramalho, Bernardo, Juanpe, Aday (Planas,
46'), Pere Pons, Borja García (Aleix Garcia, 62'), Granell, Portu
(Douglas Luiz, 70') y Lozano.
GOLES
0-1, Portu (1'). 1-1, Suárez (5'). 2-1, Messi (30').
3-1, Messi (36'). 4-1, Suárez (44'). 5-1, Coutinho (66'). 6-1, Suárez
(77').
ÁRBITRO
Alberola Rojas (colegio castellano-manchego). T.A.: Jordi Alba (87')/Juanpe (61').
INCIDENCIAS
Partido correspondiente a la jornada número 25 de LaLiga Santander disputado en el Camp Nou ante 85.417 espectadores.
Buena carta de presentación hasta que Messi dijo que, en el Camp Nou, él elige el menú. Se la puso en bandeja tres minutos después del 0-1 para que Suárez empatara. Luego sirvió otro balón a Dembélé, algo lento e impreciso. También Alba degustó las asistencias de Leo. No habían pasado ni veinte minutos cuando el propio Messi estuvo a milímetros de marcar el golazo de la jornada de vaselina. Bernardo evitó el 2-1 al límite. Leo era pura energía, una olla presión reventándolo todo. Agarró un balón cedido por Suárez tras desplazamiento en largo para coser el balón a su zurda hasta encontrar la rendija por la que penetrar. Gol. Golazo. ¡Un genio desbocado en el Camp Nou! ¿La mejor media hora del ‘10’? Imposible responder. Como tener que elegir entre el Macallan de 18 o de 25 años. ¡Qué más da! Un trago sublime siempre.
Porque cada acción supera a la anterior y porque cada minuto que pasa Leo Messi se convierte en una versión mejor de Leo Messi. Cada mutación le aleja un poco más de la humanidad.
Lo siguiente fue una falta por debajo de la barrera que sorprendió a Bono. El 3-1 con el que el genio cerraba una primera mitad genial. “A Messi lo único que hay que hacer es disfrutarlo”, decía otro genio. Amén. (Párrafo escrito antes de que ‘Leo el generoso’ siguiera regalando caramelos). Lo que cerró el primer tiempo fue una contra liderada por el de siempre que acabó en asistencia a Coutinho. El brasileño se la puso a Suárez para el 4-1. Ahora sí, si D10S quiere, se llegó al descanso.
El Girona, aunque pudiera parecer lo contrario, nunca se alejó del partido. "Échame la culpa", cantaba Messi. Los de Machín jugaron un buen partido, pero insuficiente ante el vendaval argentino. Suárez hacía los coros y todos bailaban clavando la coreografía creada por Leo. El uruguayo envió un balón al palo a los diez minutos del segundo tiempo. Luego lo probó Dembélé tras otro regalo del '10'. Omnipresente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario